En Venezuela las generaciones más jóvenes no conocen un régimen político diferente al actual. El proceso sociopolítico que comenzó hace más de 25 años con la llegada del presidente Chávez al poder ha volcado la democracia del país a un escenario cada vez más complejo y lleno de vicisitudes. En este contexto, en el año 2013, la Universidad Católica Andrés Bello condujo la primera Encuesta Nacional de Juventudes (IIES-UCAB, 2014), que arrojó que 68% de los encuestados consideraba que la democracia es el mejor sistema político para Venezuela.
La misma encuesta fue llevada a cabo nuevamente en el 2021, donde solo el 50% de los encuestados considera que la democracia es un sistema preferible, mientras que el 22,1% cree que un régimen autoritario puede ser preferible y 27,5% opina que le da lo mismo una democracia o una dictadura (IIES-UCAB, 2021). La caída de 18 porcentuales en las preferencias de los jóvenes demuestra una tendencia que favorece el apoyo de la juventud venezolana a los gobiernos autoritarios, y un detrimento del apoyo a la democracia como sistema de gobierno. Por otra parte, el informe realizado por Agenda Joven (Maestre y Zambrano, 2024), refleja que los jóvenes políticos de distintas regiones de Venezuela que fueron consultados muestran una valoración muy positiva de la democracia, interpretándola como una condición necesaria para la construcción de una mejor y más justa realidad, y a la vez un medio para que en algún momento puedan ocupar puestos de poder.
En los últimos años, el mundo se ha caracterizado por estar inmerso en dinámicas cada vez más volátiles e intrincadas, como el retroceso de la democracia liberal y la crisis climática, lo que inevitablemente aumenta la complejidad de la situación de Venezuela. Específicamente, en el estado Bolívar, siendo la entidad federal más grande de Venezuela, por su gran biodiversidad, recursos naturales y desarrollo industrial, la producción de las industrias básicas y agrícolas se ha vuelto el eje central de su economía.
No obstante, en la última década se han impulsado iniciativas extractivistas sin cuidar el impacto ambiental que puedan tener sobre estos territorios, llevando a una catástrofe ecológica y social caracterizada por la expansión descontrolada de la minería ilegal, la deforestación, la contaminación de las cuencas hidrográficas, la proliferación de enfermedades que habían sido erradicadas, el aumento de la violencia criminal y los desplazamientos forzosos (Cardozo, 2022).
Ante estos escenarios, las Naciones Unidas (Jara, 2018) especifican que de los jóvenes de todo el mundo se espera que sean los impulsores de la innovación, el crecimiento económico y el cambio social, por lo que el desarrollo sostenible recae en parte sobre aquellos que representan el futuro. Por ello, resulta crucial conocer las opiniones y valores que los jóvenes venezolanos construyen en torno a la democracia y desarrollo, en medio del contexto complejo en el que viven, especialmente en una región como lo es el estado Bolívar, que sufre de las consecuencias de una crisis ecológica y social severa.
En este trabajo tuvimos el objetivo principal de conocer la perspectiva de un grupo de jóvenes líderes emergentes del estado Bolívar sobre la democracia y el desarrollo sostenible. Para ello se establecieron como objetivos específicos: (a) conocer la imagen que construyen sobre la democracia, (b) describir lo que implica para estos jóvenes el desarrollo sostenible en su región, e (c) identificar la relación que estos jóvenes hacen entre la democracia y el desarrollo sostenible.
Para la consecución de los objetivos realizamos un grupo focal en el que se pretendía establecer un espacio de discusión e intercambio entre un grupo de jóvenes del estado Bolívar que participaron en la segunda edición el programa Hablan Los Jóvenes, abordando las temáticas que se trabajaron en la sesión formativa del programa que versó sobre la democracia y el desarrollo sostenible. Este grupo focal estuvo compuesto por 6 jóvenes entre los 22 y los 26 años, como se especifica en la tabla 1, con quienes tuvimos una discusión de 55 minutos aproximadamente. Por su parte, este fue un estudio cualitativo dónde realizamos un análisis temático del discurso de los participantes, utilizando el software MAXQDA.

Los participantes relacionan la democracia con diversos aspectos, el que más se repite es el respeto, a la decisiones, acciones y derechos de las personas, con esto se configura la palabra libertad, ya sea libertad de decidir o la libertad de expresarse. Así nos comenta Paula “Para mí la democracia es libertad de decidir” (1:3-3), y Fabio nos describe la democracia como "Libertad de expresión y respeto a las decisiones y acciones de las personas" (1:7-7). Destacan también la importancia de la participación y la representatividad como elementos asociados a la democracia.
Este último punto se vincula con el significado que existe en torno al voto, el cual es visto como un elemento que no es condición suficiente para que exista democracia. Gerardo comenta creer "que la democracia va más allá de votar, y eso es parte de lo que he aprendido aquí en más ciudadanos" (1:61-61), de nada vale el voto para estos participantes sin el respeto a las libertades personales y son la capacidad de ser escuchados en las instancias donde se toman las decisiones.
"Acá en Venezuela pasa que mucha gente dice ‘pero si hay democracia aquí votamos’ y yo bueno, aquí votamos, pero en hasta qué punto yo voté y eso se escuchó o se dio a valer. Entonces hay parte de entender el significado de democracia y que no solamente yo he ido una vez cada 6 años a votar Por un presidente, sino entender que es que yo me acerco, tengo la posibilidad de acercarme a las distancias pertinentes, por ejemplo, la alcaldía, los concejales y todas las cosas para yo aportar proyecto ideas y participar en la toma de decisiones sobre las personas que están cerca de las personas que tienen el poder en esa toma de decisión, entonces automáticamente están vinculadas." (Valentina, 1:58-58).
Parece que algunos de estos jóvenes sienten rechazo por el voto, o una idea de que no va a servir de nada votar, puesto que desde su infancia han visto cómo a través del voto no se ha logrado cambiar el estatus actual de la realidad qué los rodea. Esto se vincula a un rechazo a la participación política por parte de la juventud, al verla carente de valor o de utilidad, o por haber participado en el pasado y no haber podido lograr nada con eso.
"Cuando uno crece en un país como Venezuela, donde uno desde muy pequeño puede ver que votar no vale casi de nada, tu creces con rechazo hacia esa parte y eso genera que uno no se quiera involucrar porque entonces como que bueno, tanto trabajo tanta lucha que al final no pase nada, o sea todo siga igual, entonces yo siento que eso es un problema que viene desde hace mucho tiempo y es por eso que muchos Jóvenes hoy en día No queremos formar parte de esas instancias."
Al preguntarle a los participantes si se sienten escuchados por quienes están en cargos de poder y toman las decisiones, responden varios a la vez “depende de quien” (1:8-9). A partir de allí se hace una distinción entre los altos cargos de poder, como el estado, y otros más locales o institucionales, como la universidad.
"Porque si hablamos de del Estado, del Gobierno, en este caso yo no… Obviamente no me siento identificada (...) Yo creo que sobre todo si lo enfocamos en la realidad de los jóvenes que están con nosotros, tenemos muchas carencias, hemos hecho propuestas, y no se ha tenido ningún tipo de respuesta ante esta situación, si hablamos del estado o del gobierno en ese sentido, bueno, yo por lo menos no me siento escuchada” (Isabel, 1:10-10).
"Por lo menos, por el gobierno no. Pero hay otras comunidades o dos, por ejemplo, aquello de comunidad dentro de la Universidad, y verdaderamente me sentía escuchado antes como estudiante, porque ahorita como esto de parte administrativamente." (Andrés, 1:22-22)
Aunque parecen existir espacios y mecanismos para opinar, algunos denuncian que, al igual que sucede a la hora de votar, se hacen constantes consultas públicas, que al final no están abiertas a escuchar la pluralidad de ideas o posiciones, puesto que solo son tomadas en cuenta aquellas que consideren positivas o favorables con respecto a sus intereses, al mismo tiempo que minimizan las desfavorables para ellos. A pesar de que existan jóvenes con propuestas para que se tomen decisiones a favor del país, Paula dice que siempre se choca “contra una pared que me dice hasta aquí, porque de aquí en adelante es lo que yo decida (1:11-11)”.
"Solo que solo alzamos nuestras voces para hablar sobre lo que queremos, pero lo hacemos en espacios donde se nos dé la oportunidad a nosotros, sin embargo, el Gobierno, esa es la parte del Estado, no abre ese espacio para escucharnos libremente" (Isabel, 1:12-12).
Incluso, uno de los participantes destaca como estos obstáculos para la libre expresión han afectado su nicho de activismo, puesto que en el marco del día del orgullo LGBTI+ se encontraron una serie de dificultades para organizar la marcha del orgullo, puesto que la palabra “marcha” desataba inseguridades en los funcionarios públicos y lo ven como una amenaza o acto subversivo, por lo que tuvieron que cambiar el nombre de marcha por caminata. Aunque la intención, los objetivos y la naturaleza de la actividad sean las mismas, las resistencias del estado a ciertos temas hacen que el uso de las palabras sea crucial a la hora de establecer comunicación con ellos.
"No usamos la palabra marcha, sin la palabra caminata. Entonces tú no puedes negarme a mí una camina con banderas de colores escuchando música, que nosotros como que, ‘ah ok, entonces es una caminata, sí, pero cuidado con una marcha’" (Fabio, 1:19-19).
Para los participantes, en términos generales, el desarrollo sostenible se entiende de dos formas relacionadas entre sí. Por una parte, el desarrollo sostenible es entendido como la capacidad de crecer y desarrollarse en términos económicos de forma autónoma, sin el tutelaje de una figura o autoridad. Pero, el desarrollo sostenible también se relaciona con el hecho de que este crecimiento suceda afectando lo menos posible el medio ambiente. Ambas formas de entenderlo se relacionan al sentido de sostenibilidad como cuidado porque las cosas puedan tener cierta permanencia en el tiempo, tanto los proyectos como el medio ambiente que nos rodea.
"Para mí el desarrollo sostenible es la capacidad que tiene un país, una comunidad, un proyecto de poder este de poder crecer, de poder realizarse, como decía Valentina. Sin necesidad de que alguien este siempre ahí detrás (...) y cuando se habla de desarrollo sostenible, siempre hay que tener en cuenta, lo económico lo social y lo ambiental, y entre lo social está lo político Entre lo económico, bueno, te abarca todo y lo que estás también abarca todo, aunque a veces uno lo deje por fuera, ni la economía o la sociedad no podría existir sin el ambiente (Paula, 1:27 –27: 37-37).”
Además, para estos jóvenes el desarrollo sostenible abarca otros temas más allá de lo económico y lo ambiental, considerando que problemas sociales y políticos como la defensa de derechos y la igualdad son aspectos que también influyen en el desarrollo sostenible. Destacan la interdependencia entre todas estas áreas, el como una necesitan del progreso de las otras para poder hacer posible un desarrollo sostenible.
"cosas como entre igualdad de género, este, o sea, todo lo que es sostenible no es el ambiente, no es solo parte verde, entonces va mucho más allá de nosotros, porque seres humanos propiamente generar derechos que van a perdurar con el tiempo (Andrés, 1:38-38)."
Por otra parte, surge en los discursos la importancia de la conciencia individual y colectiva, la consciencia de comprometerse y participar activamente para hacer posible el desarrollo sostenibles través de actos cotidianos y la autogestión. Destacando que a pesar de que "el ciudadano promedio no es que tiene toda la posibilidad del mundo para participar en la toma de decisiones para el desarrollo sostenible” (Paula, 1:56-56), y que los que deseamos ser promotores de este desarrollo debemos ser conscientes en que es más que solo ir a una comunidad y ayudarla, sino también hacerla parte de su propio desarrollo (Gerardo, 1:61-61)."
Para los participantes el desarrollo sostenible en la región, a pesar de aun gozar de ciertos avances del pasado como en el uso de energías hidroeléctricas, tiene un gran retraso en la actualidad con el impacto negativo que están teniendo en el ambiente las empresas básicas y la minería, que en zonas como el arco minero no solo ha implicado el deterioro ambiental, sino también la explotación laboral, el aumento de la prostitución y el socavamiento del turismo en la región.
“El tener represas, Hidroelectricidad es un avance muy grande en el tema de gasolina, sin embargo, si nos Vamos al área Del Arco mi negra, eso es un retraso Inmenso en el tema de contaminación en el tema de éxito, nación minera explotación laboral la prostitución todo lo que abarca el tema del arco minero (Valentina, 1:43-43)."
Las empresas básicas que hacen vida en la región, para estos participantes, traen tanto ventajas como dificultades para el desarrollo sostenible, ya que por un lado impulsan el crecimiento económico y por el otro tienen un impacto ambiental negativo. Se muestran preocupados por las aguas contaminadas con bauxita y mercurio, que han afectado tanto a los animales silvestre como a los seres humanos, y en la ciudad como las comunidades adyacentes a las industrias reciben aire contaminado, afectando la salud de sus habitantes. También, se denuncian los obstáculos que algunas empresas y el estado colocan para el desarrollo sostenible, como el caso de la empresa de reciclaje que cerro por conflictos con la empresa recolectora de basura Fospuca.
“Yo vivo muy cerca de la zona industrial (...) Entonces todas las emisiones de la industria de llega hacia nosotros y hay muchas personas que padecen enfermedades respiratorias y eso es algo que no se tiene en cuenta. Entonces como tú vas a decir que una ciudad sostenible, cuando las actividades que están haciendo están impactando (Paula, 1:44-44).”
Todos los participantes reconocen una relación de dependencia entre la democracia y el desarrollo sostenible, defendiendo que "un país sin democracia Realmente jamás puede entrar dentro de esas líneas del desarrollo sostenible (XXXX, 1:53-53).” En primer lugar, se destaca que son necesarias las instituciones que existen dentro de los sistemas democráticos que brindan un marco de seguridadpara las personas, y es en este contexto de seguridad y garantías que hace posible el cumplimiento de derechos, necesarios para el desarrollo, y que lo contrario, la violación de derechos solo socava la posibilidad de que las personas puedan pensar en la sostenibilidad, más allá de su presente inmediato.
"Va de la mano, totalmente porque no fíjate un país que está en democracia, no tiene instituciones que puedan brindar esa esa seguridad a la persona. Y segundo, si no garantizas una seguridad a la persona, no se van a cumplir derechos, o sea, va a estar la constante de violación de derechos tanto humanos como derechos fundamentales y tercero, el mismo Estado crea, busca como la forma de borrar a la persona para que solamente se centre en sobrevivir y no se centre en abrir un poco más la mente, en mira, hay cosas más allá de eso (Jessica, 1:53-53).”
En segundo lugar, la democracia y sus valores se entienden como parte de los mismos objetivos de desarrollo sostenible, destacando especialmente la libertad de expresión como un objetivo y al mismo tiempo una condición necesaria para el desarrollo sostenible. Sin libertad de expresión no es posible realizar denunciar y generar propuestas en base a las necesidades de la gente. Mencionan que es importante contar con espacios de participación política, porque es la participación la que permie generar proyectos en distintas áreas del desarrollo y asignar recursos a su ejecución.
"Los mismos objetivos sobre sostenible, uno de ellos de ellos es como que esta libertad hacia las personas que las personas tengan la libertad de expresarse en todo su sentido, no solamente en las áreas a los que a ellos les conviene, entonces, en un país donde no hay democracia, no hay libertad de expresión y si no hay libertad de expresión no nos podemos desarrollar en la sostenibilidad porque entonces solamente estamos trabajando en base a lo que ellos están diciendo." (Andrés, 1:54-54).
Para estos jóvenes la democracia y la libertad se vinculan íntimamente en las construcciones de los participantes, siendo la democracia, en términos generales, el respeto y las garantías a esas libertades, y a partir de allí aportar desde la participación en la esfera pública. Esto implica en pensar en participar más allá del acto de votar, puesto que no se ve el voto como una herramienta que posibilite la representatividad de sus ideas en los lugares en los que se toman decisiones.
La interpretación que hacen estos jóvenes del estado Bolívar se debe contextualizar con respecto a dos fenómenos: por una parte, la situación nacional de las recientes irregularidades electorales y la percusión política posterior a las elecciones presidenciales del 28 de julio del 2024, que han anulado el sufragio como vía de transformación política, tal y como se manifestó en los niveles de abstención en las últimas elecciones regionales en mayo del 2025 (Fernández, 2025); por otra parte, esta interpretación puede responder a un fenómeno global de la crisis de la democracia liberal y de la representatividad en el gobierno, siendo problemas que no solo enfrentan los jóvenes venezolanos, sino el resto de los países que aspiran al democracia (Zielonka, 2024).
En cuanto al desarrollo sostenible, estos jóvenes lo entienden como un término que se vincula con muchas áreas interdependientes entre sí: lo económico, lo ambiental, lo social y lo político. Los participantes plantean un dilema entre la necesidad del desarrollo económico y la necesidad de disminuir el impacto negativo que este crecimiento tenga sobre el ambiente, además de que este crecimiento económico parece ser una condición necesaria para que las personas apuesten por el desarrollo sostenible, especialmente en Venezuela y en estado Bolívar. Estas ideas se enmarcan en el modelo económico que ha caracterizado al estado Bolívar, y específicamente la ciudad de Puerto Ordaz, centrado en un modelo de explotación de los recursos naturales y las consecuencias que la minería ha tenido para el ambiente y la sociedad de la región (Cardozo, 2022).
De este modo, la democracia se interpreta como el marco en el cual es posible avanzar hacia el desarrollo sostenible, especialmente porque en democracia se cuentan con instituciones que promueven la libertad de expresión y la representatividad en el gobierno, mecanismos a través de los cuales se pueden canalizar las ideas y necesidades que abran el paso a proyectos de desarrollo sostenible.
Por lo tanto, a pesar de las tendencias desfavorables hacia los sistemas democráticos reflejadas en las últimas ENJUVE y de los acontecimientos posteriores al 28 de julio, estos jóvenes aun ven a la democracia como una vía para lograr cambios políticos, al igual que los jóvenes entrevistados en el informe de Agenda Juvenil (2024) previo a las elecciones del 24 de julio. Estos jóvenes defienden que mientras no haya democracia no habrá libertad de expresión, y los espacios de debate y escucha de la ciudadanía se vuelven vacíos, conteniendo solo un eco de lo que el gobierno de turno desea que la gente exprese.
Cardozo Álvarez, R. (2022, 25 de mayo). El Arco Minero venezolano: una política depredadora. DW. https://www.dw.com/es/el-arco-minero-venezolano-una-pol%C3%ADtica-depredadora/a-61934013
Fernández, C. B. (2025, 30 de mayo). Venezuela: cuando votar dejó de tener sentido. Política Exterior. https://www.politicaexterior.com/venezuela-petroleo-y-politica-cuando-votar-dejo-de-tener-sentido/
Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES-UCAB). (2014). Encuesta Nacional de Juventud 2013: La juventud venezolana protagonista de la democracia. Universidad Católica Andrés Bello.
Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES-UCAB). (2021). Encuesta Nacional sobre Juventud 2021: Presentación de principales resultados. Universidad Católica Andrés Bello.
Jara, M. (2018, 28 de agosto). La juventud. Desarrollo Sostenible. https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/la-juventud/ Maestre, J. y Zambrano, J. (2024). Agenda Juvenil 2024: Año electoral desde la mirada de líderes emergentes. ResearchGate. https://doi.org/10.13140/RG.2.2.36250.04808 Zielonka, J. (2024). La democracia y la crisis del liberalismo. IDEES. https://revistaidees.cat/es/la-democracia-i-la-crisi-del-liberalisme/